Forcada: "Hay que luchar por el 'play-off'"

Vino a Palencia siendo un chaval con veinte años cumplidos. Un año después, dejó el equipo colegial en LEB Oro, siendo uno de los héroes de aquel equipo que alcanzase el ascenso. Tres años después, tras su paso por el Cáceres y el Breogán, regresa a Palencia, más maduro, pero igual de ilusionado.

Xavi Forcada nunca llegó a pensar en el regreso, pero «no dudé ni un instante en aceptar cuando recibí la llamada de Natxo Lezkano. Cuando dejas un club, no piensas en si regresarás algún día o no, sino en tu futuro más inmediato. Tuve la suerte de haber ido a equipos que jugaron el play-off a ACB. Sí es cierto que en Palencia me he sentido siempre muy querido, bien tratado. Cada vez que venía a jugar con otros equipos me recibían con aplausos. Aquí siempre he sido feliz. Vine siendo un niño y regreso siendo todavía muy joven. Mi etapa anterior en Palencia me valió para hacerme un nombre».

De aquella temporada inolvidable del ascenso, a esta ilusionante en LEB Oro. «El club ha ido creciendo en todos los aspectos año tras año. Este año nuestro objetivo tiene que ser jugar el play-off de ascenso. Tenemos equipo para luchar por ello, pero yendo paso a paso, partido a partido».

Las expectativas que se habían creado en pretemporada fueron muy altas y la afición estaba y está eufórica. «De puertas para adentro del vestuario, frenamos esa euforia. La entendemos y además sirve para que vaya más afición, pero nosotros somos conscientes que hay que trabajar mucho para meterse en el play-off, mientras fuera se habla de subir, de quedar campeones». En el primer partido de liga, en Orense, el equipo jugó al nivel de pretemporada, pero llegó el duro golpe de la derrota casera ante el Coruña. «En cierta manera, nos vino bien. Se demostró que sin jugar al cien por cien nos puede ganar cualquiera. No sé exactamente qué nos ocurrió ese día. No nos encontramos cómodos, no nos salía nada y ellos supieron jugarnos muy bien, no nos permitieron apenas contraataques. De esa derrota aprendimos la lección».

Y tanto. En Navarra volvieron a la senda del triunfo y, especialmente, a ese juego tan atractivo que ha enganchado a los aficionados. «Ganar de la manera que lo hicimos en Navarra no es fácil. Estuvimos a nuestro nivel, nos salieron bien las cosas. Defendimos con mucha intensidad y 
realizamos el juego que nos gusta. Lo bueno que tiene este equipo es que aunque algún jugador no esté bien en un determinado partido, cualquiera puede tener su día y anotar veinte puntos».

El domingo, a las 11 de la mañana, vuelven a jugar en casa, ante el Força Lleida. «Tenemos una espinita clavada y queremos quitárnosla. Vamos a ver cómo se encuentra el Pabellón». Y es que sigue el parquet muy resbaladizo por las obras y el polvo. «No es excusa alguna, porque estaba mal para los dos, pero se hizo difícil jugar el partido ante el Coruña. Somos un equipo explosivo, al que le gusta robar el balón, y si no están bien asentados los pies en el suelo se hace complicado. Estamos echando Coca-Cola en el piso para que tengamos más agarre. A ver si para el domingo puede estar todo solucionado».

Forcada está desempeñando una labor para él desconocida, la de base. «No jugaba desde niño. Natxo me lo propuso en pretemporada y acepté el reto. Me estoy reciclando. Me está ayudando mucho Quique Garrido. Somos diferentes, pero a la par complementarios en ese puesto».



Fuente: D.Palentino