El CF Palencia suma un punto en el siempre complicado "Ipurúa"

Estadio de Ipurua. 912 espectadores en las gradas, alrededor de una treintena llegados desde Palencia. Importante punto el sumado ayer por el Club de Fútbol Palencia en el siempre complicado campo de Ipurúa ante una Sociedad Deportiva Éibar que se complica su presencia en la promoción de ascenso (2-2) continuando con su mala racha de resultados, aunque mantenga la tercera posición, mientras los morados siguen con dos puntos de distancia sobre la Real Sociedad B, que también había empatado el sábado. Un tanto de Jónathan Carril (que había entrado al terreno de juego iniciado el segundo periodo) en el tramo final de la contienda permitió a los de Ramón María Calderé igualar el marcador y mantener la citada ventaja de dos puntos con el puesto de promoción de descenso. Aunque, también es verdad, la Arandina (que ocupa el último puesto de descenso que queda aún por decidir) se llevaba el derbi burgalés ante el equipo de la capital del Cid (1-0) y recorta en dos puntos su desventaja con el Palencia, que vuelve a estar en cuatro puntos. Empezaron los de Ramón María Calderé poniendo en apuros a un Éibar que arrancó titubeante. Antes de los diez minutos de juego los morados ya habían pisado dos veces con peligro el área de castigo de Xabi Irureta. En la primera de ellas, en una acción de Jandro en la línea de fondo, que acabó con el cuero golpeando en la cepa del poste tras un lanzamiento sin ángulo. Y en el minuto siete fue el delantero Molino el que, libre de marca, no acertó a cabecear ante el guardameta armero. Superado este agobio inicial de los palentinos, el Éibar de Javier Manix Mandiola respondería a pelota parada, cómo si no. Dos saques de esquina consecutivos superado el cuarto de hora de juego desembocaron en el 1-0, gol de Arruabarrena, que remató un balón peinado por Espín. Sin embargo, poco le duró la tristeza al bloque de La Balastera. Apenas nada más sacar de centro, Molino se plantó solo ante Xabi y batió la puerta eibarresa tras un inoportuno resbalón del cancerbero local. El duelo era intenso, con alternativas, con dos equipos que pugnan por diferentes metas y que necesitaban la victoria como el aire. Sin embargo, el Palencia iba a encajar un nuevo gol en el minuto 28, cuando la defensa, más pendiente de Arruabarrena, descuidó a Altuna quien, llegando desde atrás, establecería el 2-1 con el que se alcanzó el tiempo de descanso. Continuó la intensidad del primer tiempo tras el paso por los vestuarios, aunque el devenir del partido pudo cambiar en el minuto 56. El colegiado Cristian Lixandru, algo riguroso, mostró la roja directa a Joseba del Olmo en una acción en la línea divisoria de ambos campos. El atacante azulgrana empujó a un rival y el trencilla consideró que le había agredido. Con un hombre más, el Palencia embotelló a los del Bajo Deba aunque no lograría el empate definitivo hasta el minuto 83, cuando Jónathan Carril, que había salido de refresco, aprovechó una pifia de Añibarro para establecer el 2-2 con el que acabarían los 90 minutos. El tiempo restante, y ya con las fuerzas igualadas por la expulsión de Serrano, fue para el Éibar, que asedió la portería palentina en busca del tercer tanto, pero se toparon los armeros con un bloque morado que no dejó pasar la oportunidad de puntuar en Ipurúa. Los de Calderé habían ganado al Éibar en la primera vuelta. fuente: diario Palentino