El conjunto becerrileño fue testigo de excepción de una exhibición de juego y goles de una Virgen del Camino que no tuvo ninguna compasión. El equipo local jugó un excelente partido, tal vez el mejor en lo que va de temporada, e hizo pagar los platos rotos a los palentinos que solo fueron capaces de aguantar la primera parte. Eso sí, los del Becerril controlaron el choque durante más de media hora y pusieron en serios aprietos a un conjunto que aspira a estar entre los mejores de la categoría al final de temporada.
El viento jugó un factor decisivo para los contendientes durante todo el encuentro. Y es que los primeros 45 minutos con viento a favor, los pupilos de José Antonio Hernando controlaron el centro del campo de Los Dominicos sin comprometer en ningún momento la portería defendida por Sevi. Le costaba mucho llegar a La Virgen del Camino, que entró fría y sin la habitual tensión que suele tener cuando juega como local. No fue hasta el minuto 29 cuando una jugada embarullada propició el primer gol del partido. Fue tras una acción de los delanteros locales con posterior rechace para que Ramírez reventase la bola sobre las redes de la portería visitante.
Poca historia tuvo el primer tiempo en el que La Virgen del Camino pareció querer relajar la tensión y amansar a un equipo que hasta ese momento había transmitido muy buenas sensaciones y que había saltado al campo con el objetivo de sumar tres puntos. El cuadro virginiano se dedicó a replegar líneas y buscar balones largos esperando un fallo del Becerril que no llegaba.
La segunda parte nada tuvo que ver con la primera. Tres factores fueron decisivos para que esto sucediese. Por un lado, La Virgen del Camino es un equipo que cuando juega como local y con el marcador a favor resulta poco menos que inabordable. Por otro lado, el Becerril con un gol en contra no supo tener respuesta. Era un partido que ya habían vivido muchas veces esta temporada los palentinos. Por último, el factor físico propiciado por una primera parte de mucho desgaste por haber jugado con el viento en contra. Los visitantes se vinieron abajo y La Virgen del Camino jugó a placer.
El Becerril se convirtió en un convidado de piedra a merced de los locales. Aún así, el cuadro leonés tardó más de 25 minutos de la segunda parte en conseguir el segundo tanto del partido. Lo hizo el lateral derecho Charly en un auténtico golazo. Una jugada de Mario Villar que no encontró gol pero propició un rechace largo desde más de 25 metros, punto desde el que Charly golpeó el cuero sobre la escuadra del meta Sevi. Un gol de tronío para sentenciar el choque.
A partir de ahí fueron veinte minutos de mucho sufrimiento para los becerrileños. Y es que los de José Antonio Hernando no supieron si irse a recortar distancias o a mantener un resultado que no era excesivamente punitivo con su partido.
Los que sí se vinieron arriba fueron los locales sabedores que el promedio de goles puede resultar decisivo a final de temporada. Así en el último cuarto de hora Ori hizo el tercero en una jugada de calidad dejando sentados a dos rivales desde la banda izquierda y cruzando la pelota al palo izquierdo.
Por si fuera poco, cuando el colegiado Ribera García estaba a punto de decretar el final del encuentro, La Virgen del Camino se sacó otra jugada magistral de la chistera. Esta vez fue Perona quien desde la banda derecha ajustó la pelota sobre su pie para colocarla al punto de penalti. Ramírez se sacó una chilena fantástica con un escorzo que puso el graderío en pie y el 4-0 en el luminoso de Los Dominicos. Otro gol de bandera para poner el colofón a una buena tarde de fútbol en la que uno de los dos equipos disfrutó mucho y el otro puso de manifiesto que aún le queda mucho trabajo para competir de tú a tú con algunos rivales dentro de la categoría.
fuente: Norte de Castilla
No hay comentarios:
Publicar un comentario