sábado, 16 de noviembre de 2013

Maldito tercer cuarto Autocid

ÁRBITROS: Víctor Mas Cagide y Juan Francisco González Cuervo. Sin eliminados.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la séptima jornada de liga en LEB Oro, disputado en el pabellón Marta Domínguez, de Palencia, ante unos 2.500 espectadores.

Parciales: 17-21; 15-23; 23-6; 19-13.

Autocid Ford Burgos cayó en la pista palentina y sumó su tercera derrota de la presente temporada en un partido en el que hubo dos partes. Una primera mitad de dominio burgalés, con mejor juego de los de Andreu Casadevall. Y una segunda mitad en la que mandaron los palentinos de Natxo Lezkano, que supieron darle la vuelta al marcador en el tercer cuarto y a partir de ahí mandar hasta el final.
No fue suficiente la aportación de Taylor Coppenrath ni de Pep Ortega. El resto del equipo estuvo muy apagado. Un mal tercer cuarto (23-6) fue decisivo para el desenlace final de un encuentro histórico para Palencia, en el que logró vencer por primera vez en partido oficial al conjunto burgalés. Se acabó el mito de bestia negra para los palentinos.
No empezó nada bien el Autocid Ford, ya que encajó en el primer ataque palentino un triple por mediación de Carles Bravo. La respuesta llegó de Jeff Xavier, que igualó de nuevo el partido con un nuevo lanzamiento triple. Comenzaban muy fuertes ambos conjuntos, decididos a ganar el partido.
Pero fueron los jugadores de Andreu Casadevall los que se mostraron mucho más acertados ante el aro rival. Así se pasó de un 5 a 3 a un 5 a 10 gracias a un parcial de 0 a 5 con la aportación de los hombres altos del equipo como Taylor Coppenrath, que fue un auténtico quebradero de cabeza para la defensa palentina.
No tardó mucho en mover el banquillo el técnico Natxo Lezkano, con el objetivo de cambiar la dinámica que estaba llevando el partido. Sin embargo, las diferencias aumentaron (5-12, minuto 6), con un estelar Taylor Coppenrath.
Apareció la figura de Xavi Forcada, que con cuatro puntos consecutivos acercó a su equipo en el luminoso (9-12, min. 5). A partir de ahí se entró en una fase de equilibrio sin que ninguno de los dos equipos tomara diferencias importantes (13-15, min. 7), aunque en todo momento fueron los burgaleses los que mandaron en el luminoso.

Regreso de Romà Bas
Al final de los primeros diez minutos, el marcador reflejaba un 17 a 21. El segundo cuarto se inauguró con un triple de Pep Ortega, que tiró el carro con cinco puntos consecutivos (19-26). El Autocid Ford consiguió, gracias a su mayor intensidad defensiva y acierto en ataque, despegarse en el marcador y situarse a seis minutos para el descanso con un 24 a 31 que precipitó un tiempo muerto de Natxo Lezkano.
Pero ni por estas. Un triple del alero Romà Bas, que reaparecía en competición tras haber superado una lesión de rodilla y con muy pocas sesiones de entrenamiento, y dos tiros libres del pívot Sergio Olmos colocaron a Autocid Ford con 12 puntos arriba (24-36, min. 15).
Era un momento crítico para un Palencia sin rumbo de juego, y que supo explotar perfectamente el cuadro burgalés. Un nuevo parcial de 3 a 6 (27-42) dejó KO a los palentinos y Natxo Lezkano volvió a pedir un minuto (min. 17). Tampoco funcionó, ya que al descanso se llegó con el resultado de 32 a 44.

Sin reacción
Tras el paso por los vestuarios, el Palencia saltó a la pista con el único objetivo de volver a luchar por la victoria. Y demostró una notable capacidad de reacción y mejoría en su juego lo que le valió para reducir distancias hasta los seis puntos a poco más de cinco minutos para el final del tercer cuarto (42-48) gracias a un parcial de 10 a 4.
Fue evidente que el Autocid Ford bajó de nivel e intensidad en su juego por lo que Andreu Casadevall tuvo que pedir un tiempo muerto.
A 2,16 minutos, Albert Moncasi empató para los palentinos (50-50), y empezaba un partido nuevo. El Palencia había dejado atrás la crisis, y ahora era el bloque de Andreu Casadevall el que tenía problemas. Un parcial final de 5 a 0, con triple incluido del escolta norteamericano Nicholas Barbour, puso el marcador en un 55 a 50 a la conclusión del tercer cuarto.
Se encendieron todas las alarmas en el equipo burgalés, que tenía por delante los últimos diez minutos para darle la vuelta a una situación que se le complicó mucho. La máxima diferencia hasta esos momentos llegó a ser de siete puntos (57-50, min. 33) y parecía que se le escapaba definitivamente de las manos a los burgaleses las opciones de victoria.
La desventaja fue ampliándose más y más, y dos canastas consecutivas de Urko Otegui situó el luminoso en un 65 a 54 (min. 37). Sin embargo, Taylor Coppenrath y Pep Ortega, ayer los mejores de los visitantes, mantuvieron a flote a su equipo y no dejaron que se hundiera definitivamente. Así se entró en el último minuto con 69 a 62. No hubo milagro y el Autocid Ford perdió su tercer partido de la temporada, en una pista en la que siempre había ganado en partido oficial.
fuente: diario de Burgos

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