Feliú, un alero para ilusionar

Sin lugar a dudas era uno de los jugadores más deseados (y más tratándose de un alero alto, siempre codiciados) de cuantos había en el mercado baloncestístico nacional, sobre todo para los equipos de la zona media alta de la tabla de la Adecco Oro e incluso para la superior Liga ACB, pero finalmente ha sido el Palencia Baloncesto el que se ha hecho con los servicios de Miquel Feliú para la próxima temporada.
Los aficionados palentinos se perdieron la posibilidad de disfrutar de su juego (el equipo de Natxo Lezkano vio mermado a su rival con su ausencia) en la eliminatoria de cuartos de final de la fase de ascenso del pasado mes de mayo. Porque era uno de los pilares fundamentales del Força Lleida. Porque en el último encuentro de la liga regular el alero manresano (17-05-1985) sufrió una luxación de su hombro derecho, que le mantuvo en el dique seco en la intensa eliminatoria que acabó decantándose del lado palentino tras cinco disputados encuentros.
Ya está recuperado y actualmente se prepara en el apartado físico de cara a incorporarse al equipo palentino en el mejor estado para una temporada que, vistos los mimbres que está añadiendo a su plantilla 2013-14 la directiva que encabezan Gonzalo Ibáñez y Fernando Martínez-Zulaica, promete ilusionar.
En lo que respecta a este alero de 28 años (pese a lo cual cuenta con una enorme experiencia como jugador), mide 1,98 metros de altura y es un tres puro. Capaz de anotar desde el perímetro, de intercambiar su posición con el ala-pívot de su equipo en determinadas situaciones, rebotea, anota y defiende. Un jugador de equipo de gran físico, calidad y personalidad. Un gran fichaje del Palencia Baloncesto.
El pasado curso disputó los 26 encuentros de la liga regular, en los que promedió, en 32 minutos de juego, 9,5 puntos (39% en los triples, con casi 100 lanzados; con el lunar del 53,3% en los tiros libres), 5,6 rebotes, 2,1 asistencias, 1, 3 robos, 2 pérdidas y una media de 11,5 de valoración.
Era su segunda campaña en las filas del conjunto leridano, donde había llegado procedente del Obradoiro (Blu:sens Monbús),  con el que consiguió el ascenso a la Liga ACB (superando en la final del Ford Burgos) en una gran campaña del equipo gallego en la que también ganó la Copa Príncipe al CBMurcia (que fue quien ascendidó de forma directa).
Formado en la prolífica cantera del Básquet Manresa, ya destacó desde las categorías más bajas, puesto que fue internacional cadete (obtuvo una medalla de bronce en Riga -Letonia- en el Campeonato de Europa de 2001, junto a Marc Gasol, Rudy Fernández, Saúl Blanco o Rodrigo San Miguel). Posteriormente también sería integrante de las selecciones nacionales junior y sub’20.
Todavía junior, en septiembre de 2002, Ricard Casas le llevaba a Canarias con el primer equipo manresano y le sacaba seis minutos a la cancha. Tenía 17 años y anotaba su primera canasta en la ACB. Jugaría cinco encuentros más de la 2002-03. antes de irse cedido al curso siguiente al Olesa de la Liga EBA. Un año después regresaba y jugaba nueve encuentros con el Manresa (nueve minutos y dos puntos de promedio), de nuevo a las órdenes de Casas, antes de irse al Hospitalet, donde estaría ese final de campaña (en LEB Plata, logrando el ascenso) y la siguiente. Lograría un nuevo ascenso en la 2006-07 con el Manresa antes de jugar una campaña en el Palma Aqua Mágica y luego en el Vic y el Girona. Desde la 05-06 hasta la fecha ha disputado la Adecco Oro.
Junto a Garrido, Forcada, Fornas y Otegui forma el quinteto de integrantes del equipo palentino.
FIENTE: DIARIO PALENTINO