Como en la reinauguración

El 10 de octubre de 2006 se inauguró oficialmente La Balastera con motivo del encuentro España-Italia del Campeonato de Europa sub’21. Cinco días más tarde fue la reinauguración del estado, con el protagonismo del Palencia, su inquilino, que derrotaba al filial del Athlétic por 1-0, tanto marcado por Carlos, curiosamente también el autor del último gol en el viejo estadio. No llegó a llenarse aquel día el estadio (de hecho sólo se ha conseguido en la ese partido España-Italia y en un Palencia-Burgos) pero estuvo cerca. Menos de seis años después, se repite el mismo partido y el club morado espera repetir la historia: triunfo y ambientazo. Este encuentro tiene mucha más trascendencia que aquél, dado que la liga no había hecho nada más que empezar. Una temporada, por cierto, que acabó con el Palencia jugando el play-off. Este domingo, sin embargo, los tres puntos tienen una importancia capital. Ganar a los cachorros de Lezama significaría abandonar el puesto de promoción y evitar de forma matemática el descenso directo, con independencia de lo que hagan los rivales directos. Ganar supondría dar un paso de gigante en la permanencia y en la salvación del club. A nadie escapa que un descenso deportivo llevaría muy posiblemente consigo la desaparición del club. La directiva se está moviendo para que las gradas de La Balastera reflejen una gran entrada. Para ello, y hasta la jornada del viernes, se ha puesto en marcha una promoción por la que se puede presenciar este partido al módico precio de un euro, siempre y cuando se compre una papeleta del sorteo Salvemos al Palencia en la sede del club, en el propio estadio, en horario de oficina. La UD Salamanca, la semana pasada, realizó una oferta muy parecida, con entradas a un euro, y la presencia de espectadores al encuentro ante la Arandina fue masiva. El club morado espera algo parecido en lo que será el último partido del Palencia en casa de la liga regular. FUENTE: DIARIO PALENTINO