Las cuentas de la salvación

Dos jornadas quedan para que acabe la liga regular en el Grupo II de la Segunda División B y, aparte de los equipos que disputen el play-off de ascenso, quedan dos puestos por decidir: el último de descenso directo y el de promoción. Hasta siete equipos están implicados: Arandina, Palencia, Real Unión, Real Sociedad B, Torrelavega, Zamora y Osasuna B. La Arandina tiene pie y medio en la Tercera División. Para salvarse directamente tendría que ganar sus dos partidos que le restan, ante los dos primeros, y que dos de estos tres equipos no lleguen a 45 puntos, Palencia, Real Unión y Real B. Para ello, los morados sólo tendrían que sumar un punto como mucho y los guipuzcoanos, ninguno. Si en vez de dos, es uno de estos tres equipos los que no llegasen a 45 puntos, jugaría la promoción. Pero tiene que ganar a los dos primeros, tarea complicada, aunque no imposible y más teniendo en cuenta que Ponferradina y Mirandés no se juegan nada, al tener asegurada matemáticamente la segunda y primera plaza, respectivamente. Al Palencia le basta con ganar un partido, o bien que no gane los dos la Arandina, para evitar el descenso directo. Para la salvación directa, evitando la promoción, depende de sí mismo, ya que sumando los seis puntos la conseguiría, aunque tenga a casi todos por delante. Al jugar Osasuna B con Real Unión y Real Sociedad B, alguno de los tres quedaría por detrás de los morados caso de ganar los dos encuentros los de Calderé. Tiene un partido relativamente asequible, el Athlétic de Bilbao B este domingo en La Balastera, equipo que no se juega absolutamente nada, y otro muy complicado, la UD Logroñés en Las Gaunas. Los de Pepe Calvo se juegan no sólo meterse en la Copa del Rey, sino, incluso, el play-off si son capaces de ganar este domingo al Amorebieta. El Real Unión ha visto el horizonte despejado tras su empate en Miranda. Si gana este domingo en el Stadium Gal a la Gimnástica Torrelavega daría un paso de gigante. En la última jornada visita el campo del Osasuna B. Podría, dependiendo de otros marcadores, no valerle el empate. La Real Sociedad B, que está en un momento dulce de juego, tiene la salvación en su mano. Recibe este fin de semana al filial navarro, que no tiene asegurada su permanencia, y en la última visita el campo del Éibar, que estará pensando en el inminente play-off y que es posible que para esa jornada ya esté matemáticamente clasificado como tercero de grupo. A diferencia de otros años, en esta temporada será más complicado que se produzcan pactos de no agresión, por llamarlo de alguna manera. Y es que, ahora mismo (otra cosa podría darse en la última jornada) dada la igualdad en la general no hay muchos encuentros en los que interese un mismo marcador a los dos. La Gimnástica de Torrelavega se ha complicado y mucho la existencia con su derrota ante el filial guipuzcoano. De haber podido lograr la salvación se ha metido directamente en el un complicado laberinto. Es, posiblemente, el equipo que peor llega a este tramo final y tiene un calendario durísimo. El domingo visita el campo del Real Unión de Irún, en un partido de alto voltaje para salvar la categoría, y en el último encuentro recibe al Alavés, que se estará jugando el play-off de ascenso a Segunda A. Si los cántabros no ganan ninguno de los dos partidos, tendrán complicado salvar la promoción, dado que bastaría con que el Palencia ganase un partido y la Real B empatase los dos que le quedan. El Zamora está metido en la pomada pero por cuestión meramente matemática, porque lo lógico es que gane este domingo al Burgos en su feudo y que no le haga falta tener que puntuar en El Helmántico ante su eterno rival, el Salamanca. El Osasuna B tiene 47 puntos, pero no está salvado. Le valen dos puntos, dos empates ante Real B y Real Unión, pero a sus rivales, si el Palencia gana los dos partidos, no le conviene ese reparto de puntos porque les superaría y dejaría en puestos de promoción. fuente: diario palentino