domingo, 1 de abril de 2012

El Palencia amplia el abanico por el descenso

El Palencia ha derrotado al Zamora (1-0) gracias a un solitario tanto de Chupri en el minuto 42. Sin embargo, el conjunto zamorano pudo marcharse goleado de La Balastera si los locales hubiesen superado sus fobias delante de la portería rival. Canario y Carrill pudieron dejar el partido visto para sentencia en la primera mitad, pero no acertaron. No hubo que lamentarse, al contrario que en otras ocasiones, y los de Calderé suman una importante victoria en su lucha por lograr la permanencia. Importante, porque el Zamora, que hace apenas unas jornadas se veía salvado y tranquilo, se queda solo a tres puntos de los palentinos (41, por los 38 de los morados) y tendrán un final de temporada tan difícil como el de los jugadores de Calderé. Importante, porque el Palencia se sacude los nervios a base de triunfos, y logra el tercero consecutivo en un esprín de Liga que puede ser decisivo, aunque largo, ya que la salvación puede irse a este ritmo incluso a los 48 puntos. ¡Una salvajada!
La peor de las noticias de un partido que el Palencia dominó en la primera mitad, y que en la segunda, pese a bajar el pistón, tampoco pasó apuros, fue la victoria de la Real Sociedad B en Burgos (0-3). El principal rival de los morados también ha puesto velocidad de crucero y sigue en su lucha con los palentinos por eludir los puestos de descenso y el de promoción, puesto que ocupa en la actualidad el club morado, con los mismos puntos que los donostiarras.
Después de dejar escapar vivo al Zamora durante los primeros 45 minutos, el equipo visitante se rehizo en la segunda mitad. Recuperó el esférico, pero apenas inquietó al meta Ruyales, quien vivió su partido más plácido de los últimos tiempos. Solo el zamorano Jorge Hernández, que entró en la segunda mitad, tuvo la suficiente profundidad para inquietar a la zaga local.
El Palencia también bajó el ritmo mermado por los problemas físicos de la dupla Durántez-Pelayo –sustituidos– y la lesión en el hombro de Carril, quien tuvo que dejar su sitio para un inspirado Molino.
Calderé y los suyos ya piensan en el próximo encuentro, ante la Segoviana, en el que la victoria supondría, en palabras del propio técnico local, «un paso de gigante» para lograr la salvación.
fuente: Norte de Castilla

No hay comentarios:

Publicar un comentario